Es una historia muy larga, pero si la Cementera estuviera más alejada de los núcleos residenciales, escolares y comerciales. Y si no se vieran ocasionalmente capas de polvo en las calles, frecuentemente al amanecer… tras no poder ver el humo por la noche… o en días de niebla ¿O era humo? ¿O humo y niebla?. Si todo esto fuera así, confiaríamos más y nos creeríamos mejor que lo de que incinerar residuos es bueno para el planeta, para Alcalá de Guadaíra y para los vecinos de la Barriada de «La Liebre».
¿Por qué están ahí «pegados» la barriada de «La Liebre», un colegio y una zona comercial importantísimas?
Pues eso es algo que no es culpa de la Cementera Portland Valderrivas. Eso es culpa de nuestro Ayuntamiento. De nuestra incapacidad para resolver problemas durante años y años. Nuestro problema y lo tenemos que resolver nosotros.
Nosotros dejamos consolidar un núcleo residencial, le añadimos un colegio que podría no haber ido ahí y luego a seguir mirando para otro lado.
¿Por qué todavía no hay un punto de control oficial de la calidad del aire en la barriada de «La Liebre»?
Los datos de control serían estándares y públicos, tomados en el sitio que más nos preocupa a todos. En Alcalá de Guadaíra hay una estación, pero se encuentra por Pablo VI a más de 5 Km. en línea recta. La Barriada de la Liebre está a la distancia del ancho de la Autovía A-92.
¿Y la solución? ¿Qué hacemos?
Un pena que no lleve años una estación de medición de la calidad del aire allí para que sus mediciones no me dejaran decir lo que voy a decir, pero ni con los mayores estándares actuales de control técnico, parece lógico que haya gente viviendo pared con pared con una cementera. Menos todavía si está acumulando y moviendo «residuos» que pueden provocar otras molestias adicionales.
El barrio de la «Venta de la Liebre» está hoy mucho mejor que hace años, aunque siempre ha estado aislado y con problemas derivados de ese aislamiento. Es una locura pensar en mover el barrio, pero es mayor locura seguir viviendo ahí sin las garantías adecuadas. Y yo no creo que tengan esas garantías.
No digo que no sea estupendo vivir ahí, porque los barrios generan sentimientos de pertenencia y afinidad que no se pueden comprar. Pero es también igual de estupendo y legal fabricar cemento ahí al lado, igual de legal que incinerar residuos para contaminar menos teóricamente. Así que, con lo que viene, si pudiera evitar vivir ahí con mi familia, lo evitaría. Es la realidad. Y ahí viven trabajadores de la cementera también.
Por supuesto, otra opción es ponerles tan complicadas las cosas a la fábrica de cemento que se tengan que ir de Alcalá. No la van a mover sólo unos cientos de metros, se irían. Tampoco van a renunciar a incinerar, sobre todo porque les hace más competitivos y porque es legal en medio mundo, incluyendo España. Y es que, además de ser algo más ecológico que lo que hacemos ahora con algunos residuos, también generaría empleo, actualizaciones tecnológicas, etc…
¿A largo plazo, qué nos costará más dinero a los alcalareños, mover la barriada o cerrar la fábrica?
Seguiría la Cementera estando cerca de los centros comerciales, pero ahí no duermen familias. Y, combinado con unas altas y mejores exigencias de control más sus planes de emergencia, reduciendo las toneladas que incineraría, no tendría porque ser tan crítico.
Dinero y viviendas para mover poco a poco el pequeño barrio de corazón grande, permitiendo que sigan unidos en un sitio más sostenible, es lo razonable. Hay suelo disponible si hay voluntad.
Tampoco creo que el PSOE de Alcalá quiera solucionar este problema que ellos mismos han causado, aumentado y anclado, con el coste en votos que tendría para ellos. Su postura es la de ponerse de perfil y que todos paguemos las consecuencias. Tanto las legales con los conflictos jurídico-Administrativos con la Cementera, como los de la Salud de los vecinos. Lo que no pueden costar es votos en las siguientes elecciones que vengan.
Aquí es bueno recordar que el PSOE no gobierna hoy en solitario. Aunque me temo que Ciudadanos de Alcalá de Guadaíra no será coherente con lo que dijo en 2016, por lo que también mirará para otro lado. El mismo al que mire el PSOE.
Los únicos que no miran para otro lado son los Ecologistas y su plataforma, a los que hay que agradecer su preocupación por el cumplimiento estricto de las normativas. La Cementera no debería tener problemas en responder legalmente a todas las preguntas que le surjan. Y los ecologistas no podrán hacer nada si todo es legal.
Total, que salvo milagro, todo seguirá igual y seguirá habiendo problemas sin resolverse hasta que algo muy grave pase.
La Noticia:
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Sindicatos y plantilla de Cementos Portland defienden los «proyectos sostenibles de futuro» de la compañía
Los sindicatos USO, CCOO y UGT, así como los trabajadores de Cementos Portland en el municipio sevillano de Alcalá de Guadaíra, han defendido los «proyectos sostenibles de futuro» de la compañía.
En un comunicado conjunto, indican que hace más de cinco décadas que la fábrica de cemento forma parte de la ciudad y, desde estos inicios, «su proceso de fabricación de cemento se ha ido modernizando con inversiones dedicadas a mejorar la calidad de producto, optimizar la eficiencia del proceso e introducir mejoras ambientales de acuerdo a las exigencias de la Unión Europea».(…)
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